sábado, marzo 04, 2006

La verdad puede ser dulce y excitante o amarga ácido acre




Puntillazos:


La verdad puede ser dulce y excitante o amarga ácido acre y tiene colores

Desde siempre o desde cuando me inicie en el uso de la Razón he creído de la verdad otra cosa no lo que realmente significa o es: La verdad es la cosa más bella.

No mintamos a nuestros papás, que no hay cosa más bella que un niño,

Cuando sabe decir la verdad.

Lo que acaban de leer es la primera estrofa de una canción escolar de antaño y terminaba así: Dónde esta la verdad esta Dios. Hago la cita para orientar a los Jóvenes que no han oído de esas cosas.

Mi madre me enseñó esta canción y la tía doña Julia (abuela y madre de Anthony Ríos, porque era la madre de su padre y lo crió) le gusto mucho que le hubiera deleitado con esa melodía en mi primer día de clases, “el primer niño que ha cantado en solo en el primer día de clases en toda la provincia” repetía una y otra vez a cuantos se le acercaban. Se refería a: El Seybo que entonces abarcaba los municipios de Santa Cruz de El Seybo, Hato Mayor, Sabana de la Mar y Miches y ella había ejercido el magisterio en todos.

Esa canción viene a cuento porque se refiere a la verdad sólo en cuanto a parte de sus aspectos morales y éticos en el entorno paternal o familiar pero el concepto verdad encierra múltiples valores imposibles de enumerar aquí, entre los que se destacan sus fundamentos religiosos, profesionales, patrios, fraternos y cívicos.

Pero la verdad tiene tambien sus valores o significados metafóricos de los que nadie habla. Los periodistas sabemos mucho de esto, apenas publicamos una verdad que afecta los intereses morales o materiales de algún personaje de fachada, en el acto comienzan los desmentidos y los intentos de ponernos en el descrédito; y es lógico porque la verdad no es todo lo hermosa y santa como se le describe y como todas las cosas tiene su lado malo y su lado bueno o su lado feo y su lado hermoso. Yo diría que existe una verdad intrínseca y otra metafórica. Y es que metafóricamente es como la entiendes los mentirosos y los personajes de fachada que quieren escuchar solo las cosas que les agraden y arregladas a su conveniencia, naturalmente.

Cada vez que usted oiga un personaje de fachada vomitando porquerías por el mismo orificio por donde come, criticando a uno más periodistas es porque han dicho de él verdades intrínsecas, con apego a una realidad u ocurrencia, no lo que ellos hubiesen querido oír. Esto no ocurre con las personas auténticas, que no temen nada, no hacen nada incorrecto y no les importa lo que de ellos se diga, porque la verdad siempre prevalece. Si un periodista de fachada (que los hay, por aquello de que: de todo hay en la viña del señor) dice en alguna ocasión una “verdad metafórica” de algún personaje auténtico, eso no le molesta porque no tiene nada que temer y la verdad siempre prevalece.

Pero si un periodista auténtico, de verdad intrínseca, dice una verdad de un personaje de fachada le viene la debacle, puede perder el empleo, confrontar persecuciones, atentados, exilio y hasta le puede costar la vida.

La verdad intrínseca: es la verdad de Dios. Es precursora de paz, salud mental y física, bienestar general, felicidad y prestigio, familiar, profesional y social.

Su símbolo es una estrella fulgurante en el firmamento, con destellos en halo de luces multicolores, en los que se destacan los matices sagrados como el azul, carmín, púrpura, violeta y rosa entre otros de los llamados pastel y una estela infinita con los colores del arco iris.

La verdad metafórica: es la verdad del diablo. Deja una sensación amarga, ácido-acre, puede causar náuseas, vómito, diarrea, dolores neurálgicos, mialgias, sube el estrés y la presión arterial, puede causar vahídos, ataques cardíacos, infelicidad y derrames cerebrales entre otros síntomas y problemas de salud.

Su símbolo es un foso de fondo negro como el petróleo, de aureola esférica, simbolizando el fuego, con una base de rojo candente que se expande en tonos anaranjados incandescentes. Similar al “Seól” “el infierno” del que hablan los antiguos hebreos en La Biblia. Gracias amigos.

Moisés Iturbides. E/mail:/miturbides@yahoo.com

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