Puntillazos:
En cierta ocasión, en el ejercicio del poder como casi toda su vida; Balaguer dijo que alguien se hizo “pupú” fuera del cajón. Si lo dijo Balaguer no es una vulgaridad y me permito repetirlo aquí: El secretario de salud pública en dominicana, doctor Bautista Rojas Gómez, se hizo “pupú” fuera del cajón y la regó en todo el país, con el asunto del dengue hemorrágico.
El funcionario de Fernández negó hasta el hastío que hubiera en el país dengue hemorrágico cuando los casos pasaban de dos mil y el colegio médico había denunciado que el asunto era ya una epidemia.
Aún cuando la clase médica demandaba la atención de su cartera, mientras los hospitales y clínicas privadas recibían casos tras casos y los muertos eran ya 20. El doctor Rojas Gómez continuaba en su inexplicable actitud. (Vea informacion de la enfermedad en: Reportajes//Ve... Holística)
Se dice que Leonel es el alumno más aventajado de Balaguer pero hay materias en las que le regalaron puntos porque en definitiva deja mucho que desear y supuesto; es el mejor embaucador del país en mucho tiempo y definitivamente un buen demagogo no es necesariamente un buen político y mucho menos buen gobernante.
Balaguer hubiese aprovechado la coyuntura del 16 de agosto y removido al titular de salud pública; pero el presidente Fernández no haría eso porque las designaciones de Fernández son premios de grupo en base a la fidelidad a su persona, el PLD tiene una cantera de muy buenos médicos pero Fernández prefiere un demagogo que le sea leal al frente de una cartera tan importante; en un país donde la farmacopea se ha convertido en el poder más influyente, con los precios de las medicinas por las nubes y se oponen la entrada del país en el Tratado de Libre Comercio con Centro América y Estados Unidos porque no quieren competitividad, pero esto es asunto para otro momento.
Mientras tanto amigos lectores les decimos que una de las gratificaciones de la profesión periodística es sentir el placer de participar en una campaña de defensa de la comunidad. En este caso el pueblo humilde que sufre la fatídica epidemia en dominicana.
Nosotros participamos activamente en la campaña que obligó al titular de Salud Pública a admitir que había escondido información sobre la malvada enfermedad; la prensa nacional hizo un papel responsable pero carecemos de un congreso donde abunden pantalones que lo interpelen y demanden su destitución por mentirle al país, ni tenemos un movimiento ciudadano fuerte que lo lleve ante el Supremo Tribunal de la República; porque los intereses creados constituyen una junta de expansión entre los estratos políticos, económicos y sociales de la nación.
Para los periodistas el reconocimiento de que mentía del secretario de salud resulta una gratificación pírrica porque están en juego los padecimientos de nuestras gentes más humildes, los que no tienen otro medio de atender su salud que no se la migaja que le ofrece el Estado, ahora en manos de un gobernante que esta gastando todos sus ingresos en la construcción de un “metro” no se de cuantas pulgadas, que nadie sabe si se terminará o si definitivamente sirva para algo porque se esta construyendo al brigandaje, sin los estudios necesarios, según la opinión de peritos internacionales con conocimiento de causa. Gracias amigos, volveré con ustedes si Dios lo permite. Moisés Iturbides.
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